"Es mejor vivir de la experiencia de la Revolución
que escribir sobre ella"
V. I Lenin.
El Estado y la Revolución es quizás la obra sobre el Estado, más exacta de la historia. Lenin, desglosó de forma patente, la composición clasista de esta institución y su labor opresora de una clase en detrimento de otra.
Primeramente, Lenin caracterizo el surgimiento del Estado y su papel en la historia, como el producto de los antagonismos de clase, como la "insociabilidad" de las contradicciones de clase; puesto que este emerge, en el instante en que las contradicciones en el Estado indica que inexorablemente las clases son irreconciliables.
No obstante, el Estado goza de complejos mecanismos de opresión. En el Estado moderno sus formas de opresión son: el ejército permanente y la policía. Estos son los encargados de conservar el "orden", además de una burocracia de funcionarios forjados por el Estado burgués para mantener los privilegios de esa clase.
Lenin determinó, que a pesar de las formas que adopte el Estado (democrático, parlamentario o absolutista) siempre la clase dominante colocara en segundo plano estas formas, con tal de mantener su poder omnímodo.
Pero mas allá de concentrarse en la naturaleza clasista del Estado, Lenin patentizo, el papel que debe tomar la clase oprimida (el proletariado) en el momento de arrebatarle el poder político a la burguesía; esto quiero decir, ¿Qué hace el proletariado con la maquinaria estatal conquistada?
Siguiendo las premisas anteriormente desarrolladas por K. Marx, Lenin afirmo que la primera labor del proletariado organizado como clase dominante en el poder, es destruir la maquinaria estatal burguesa, sustituyéndola con un aparato que no seria propiamente un Estado. Siguiendo de igual manera las ideas de Engels expresados en su obra el "Anti-Dühring"; este nuevo Estado no seria lo que un estado oportunamente significa, sino seria un "semi Estado", con la simple función de oprimir a la clase burguesa derrotada, que no se conformaría con ser "oposición", sino que intentara porfiadamente restaurar su dominio de clase.
Lenin no se detuvo ahí, afirmo que al transformar revolucionariamente el Estado, el proletariado en su fase de transición del capitalismo al comunismo (socialismo) tiene como obligación histórica barrer el trasto del Estado burgués, e iniciar consecuentemente la construcción de este "semi Estado", que se materializaría con una forma de democracia "mil veces superior" a la burguesa, la dictadura del proletariado. Esta conducida por el partido de la clase proletaria e indudablemente por la clase obrera misma.
Finalmente V.I Lenin afirmo, que este "semi Estado" materializado en la Dictadura Proletaria, no podía existir eternamente, duraría mientras el proletariado necesite el Estado para aplastar las intentonas de la burguesía de recobrar el poder, subsecuente y progresivamente, el Estado como entidad de opresión clasista desaparecería, ya cuando la sociedad dividida en clases sociales no exista y el comunismo este consolidado a nivel mundial.
Ahora después de esta explicación ineludible para lograr aclarar el tema cardinal del Estado, la Revolución Bolivariana tiene por delante un reto enorme. Dadas las circunstancias peculiares de esta revolución, es muy complejo hablar de los postulados explayados en el Estado y la Revolución. Pero lo que tiene una incontestable verdad, es la necesidad de exterminar la maquinaria estatal burguesa, seria puerilidad pensar que con los funcionarios heredados de la "Cuarta Republica", se puede aunque sea mínimamente construir el socialismo. Negarlo es caer en la pusilanimidad mas despreciable, e indudablemente hacerle el juego a la burguesía.
La gran importancia de la Revolución Bolivariana en Venezuela, reside en que es el primer caso en el mundo de un movimiento que presenta un claro desafío al "Nuevo Orden Mundial", no solamente en la calle, en la selva o las montañas, sino desde el poder popular en el
Estado, con la propuesta del "Socialismo del siglo XXI". Esta experiencia venezolana es crucial para la renovación de la izquierda a nivel global, ya que el Estado de poder popular revolucionario, no se fosiliza en un sistema burocrático fijo que lo conduciría a perder inevitablemente su carácter democrático popular y llevaría a largo plazo la restauración del capitalismo, si no que intenta avanzar cada día más reforzando los valores y la dignidad humana.
Por ultimo, en toda revolución socialista que intenta construir un mundo mejor, es urgente plantear la cuestión espinosa del Estado, tal y como lo hizo Lenin en el Estado y la Revolución, claro esta, respetando las respectivas circunstancias históricas. Hacer caso omiso de esto, es indudablemente el peor error que se puede cometer.
Dubraska Hernández
EPG-UBV
EPG-UBV
No hay comentarios:
Publicar un comentario